Walter Gropius y la Bauhaus

La Bauhaus fue una escuela de arquitectura y diseño nacida en Alemania y activa en el período comprendido entre 1919 y 1933. Nació en el contexto sociocultural de la República de Weimar, ciudad donde estuvo asentada de 1919 a 1925, mientras que primero se trasladó a Dessau de 1925 a 1932, y finalmente a Berlín entre 1932 y 1933, y luego se cerró en contraposición al ideal nazi.

Bauhaus: la historia

La idea conceptual de la escuela fue obra de Walter Gropius, quien creó su identidad y promovió su apertura. Concebido por Walter Gropius, el término Bauhaus recuerda la palabra medieval “Bauhütte”, que en español significa: cobertizo, indicando la logia de los albañiles.

El edificio representó el punto de referencia para todos los movimientos de innovación en el campo del diseño y la arquitectura relacionados con el racionalismo y el funcionalismo, incorporados dentro del gran contenedor del Movimiento Moderno.

Pero la escuela también exaltó el carácter industrial de las ideas y los productos, tanto es así que aún hoy la empresa alemana Tecta produce reproducciones de elementos de mobiliario diseñados por la Bauhaus, utilizando la ayuda de documentos y dibujos de la época.

Walter Gropius esperó desde 1915 para poder dirigir de manera autónoma la Escuela de Arte Aplicado de Weimar, que cerró cuando el caos mental (así como social) de la época justificó la destitución de su fundador Henry van de Velde como extranjero. Sin embargo, van de Velde tuvo la lucidez de señalar al propio Gropius al Ministerio, proponiéndole como posible sucesor junto a Hermann Obrist o August Endell. 

En octubre del mismo año, Gropius fue llamado a dirigir la sección de arquitectura de la escuela por Fritz Mackensen, quien dirigía el Instituto Superior de Bellas Artes del Gran Ducado de Sajonia, con una carta. Sin embargo, hubo muchas diferencias entre los dos sobre la forma que debía tener el curso de arquitectura.

La Bauhaus fue inicialmente subvencionada por la propia ciudad de Weimar, administrada en ese momento por la socialdemocracia. Sin embargo, tras el cambio de gobierno, varias disputas con las autoridades junto con una creciente hostilidad de la opinión pública en la ciudad llevaron al cierre definitivo del instituto en Weimar.

En 1925, la escuela se vio obligada a reabrir en Dessau, donde se construyó el famoso edificio que la albergará, diseñado por el propio Walter Gropius. El edificio representa el manifiesto del nuevo clima racionalista del que la Bauhaus se convirtió en el principal exponente. En Dessau, el entusiasmo por la artesanía declinó, mientras que Gropius finalmente pudo ampliar los horizontes de la enseñanza de la arquitectura.

En este contexto, se intensificaron las publicaciones de la escuela, incluyendo la “Bauhausbücher” y una revista cuatrimestral “Bauhaus”, monográfica y compuesta con caracteres exclusivamente en minúsculas y estandarizados según DIN.